Tu mañana es el final de una cuerda floja en suspensión, un paso más.
Esta soga se agota donde de nuevo comienza atándose otra.
Dudas, incertidumbres, vértigos, patinazos y decepciones… no impiden que sigamos adelante con nuestros peligrosos malabares.
La vida es un riesgo, una cuerda floja que miramos ansiosos desde este incomodo extremo soñando salvarla para llegar excitados al otro.
Cruzarla con una sonrisa no garantiza el éxito pero sin duda ayuda a caminar serenos sin mirar abajo.
Me encanta esta poesía. Que sensación tan buena y tan mala produce a la vez esta palabra, "cuerda floja".
ResponderEliminarNo sé como habrás dado con mi blog, pero en cualquier caso me encanta que alguien que escribe así forme parte de él de alguna manera. Ya tenemos algo en común, la fecha de inscripción!. Espero que este nuevo año que viene te inspire de algún modo para seguir escribiendo. Un saludo
Gracias por el comentario, tu blog me ha llamado la atención. No me digas como lo encontré... lo bueno no suele buscarse, siempre aparece por capricho de la casualidad.
ResponderEliminarsi. Es mejor caminar por la cuerda floja sonriendo, ya que si vamos cabizbajos evitaremos la mirada frontal, esa que es nuestra vida, la conexion infraganti del sentido ocular, y no veremos el arcoiris que despues del vendaval pluvial,ilumina nuestra piel ajada mas no muerta! un saludo!! grande
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